El Fin de la Arquitectura - Patrik Schumacher

12.09.2025

El cadáver woke.

"La arquitectura está muerta" 

Patrik Schumacher lo anuncia sin metáforas ni concesiones: lo que hoy se produce y se enseña en las escuelas bajo el nombre de arquitectura no es más que un cadáver maquillado, un oficio sin teoría, una practica sin innovación y sin coraje.

En su ensayo "El Fin de la arquitectura" (1) , el director de Zaha Hadid Architects sentencia el suicidio de la disciplina: "los arquitectos hemos renunciado a nuestra autonomía crítica para refugiarnos en el confort del moralismo y el cliché académico".

Schumacher acusa : la arquitectura no fue destruida desde fuera, sino desde dentro. 

Las escuelas, las bienales , los congresos y las revistas abandonaron su función de incubar pensamiento y se entregaron al espectáculo de la corrección política.




"Los arquitectos hemos degradado la arquitectura al  estatus de artesania."

En lugar de innovar en formas, espacialidad y procesos , hoy se diseña  ( y premia ) discursos sobre racismo, género , colonialismos, apropiaciónes culturales, cambio climatico , como si la arquitectura fuese un ministerio cultural o peor aún , una ONG.

El resultado: un vacío teórico y una parálisis proyectual que convierte a los arquitectos en fabricantes de "meros edificios", en "artesanos" de una disciplina extinta que no acompaña los cambios sociales impulsados por la tecnologia y la inteligencia artifical.

El arsenal de frases anestesiantes : "bienestar", "inclusión", "placemaking", "sostenibilidad"."ëquidad espacial ",  funcionan como "profspeak" ( discurso progresista sin contenido) : un lenguaje hueco que evita la confrontación y la crítica.

Para Schumacher, esto es la lápida que sella la tumba de la arquitectura: 

"cuando el discurso se convierte en propaganda, la disciplina deja de producir ideas y se limita a ejecutar normativa sin  cuestionarse asi misma ,  como si se tratase de una artesania"

"Los arquitectos hemos degradado la arquitectura al estatus de artesania."

Arquitectura no es activismo

Su golpe más filoso es contra la politización woke de la profesión. 

Convertir la disciplina en un manifiesto activista socializante —para él— es una farsa. 

La arquitectura no tiene poder para resolver desigualdades sociales estructurales ni crisis globales.

Su misión es otra: " generar marcos espaciales innovadores que ordenen la vida social en un mundo complejo y en constante transformación.  Lo demás, insiste Schumacher, es teatro moral."

Schumacher no se esconde: defiende el capitalismo, la innovación tecnológica, la IA y el parametricismo como la única vía viva de experimentación. 

Todo lo demás —minimalismos reciclados, neo modernismo nostálgicos, posmodernismos revenidos es necrofilia estilística

"mientras la academia se distrae con discursos woke , la arquitectura retrocede un siglo"

"La mayor parte de la arquitectura producida hoy podría haber sido diseñada en 1925."

Final

Schumacher no llora consenso, exige tomar partido. 

Aceptar la desaparición de la arquitectura como disciplina crítica, y desde alli producir su autonomía para volver a innovar. 

Schumacher dinamita la complacencia de una disciplina que hoy se refugia en causas ajenas , la agenda woke , mientras su función vital se desvanece. 

Y lo hace con una sentencia imposible de ignorar:

"La arquitectura ya no existe. Lo que queda son ruinas conceptuales vestidas de virtud."

                                                                                                                                        ICU septiembre 2025

Fuentes:

(1) The End of Architecture - Revista  KHorein 29 de diciembre 2024.

(#) "Me catalogan de fascista " Diario The Guardian enero 2018. 

(##) Virtue signalling has killed my profession. Diario The Telegraph marzo 2025.